Descubrimiento final


Cerró los ojos un momento y así, de golpe, su vida cobró sentido. Se echó hacia atrás y relajó cada músculo, sus ojos se sellaron, su cuerpo fue perdiendo solidez, escurriéndose como plomo líquido hacia el piso, aguándose poco a poco hasta que solamente quedó un humante charco.

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La voz de Selena